Hijos de la tribu
En el primer capítulo de Cosmos, Neil DeGrasse Tyson explica cómo alterar tan solo un centímetro la trayectoria de un meteorito en los confines del sistema solar, hace millones de años, supone la diferencia entre que ese meteorito impacte con la Tierra millones de años después, produciendo la extinción masiva de los dinosaurios, o no. Pues bien, la Atención Temprana es lo mismo aplicado a la vida de nuestros hijos. De ese pequeño empuje en los primeros meses y años de su vida depende en buena medida toda su trayectoria posterior: como individuos autónomos con capacidades casi plenas, o como seres abandonados a merced de sus limitaciones, muchas de las cuales se podían superar. Por suerte o por desgracia nuestros hijos con discapacidad son, más que ningunos otros, hijos de la tribu. Necesitamos a la sociedad, a todos vosotros y sobre todo la plena implicación de todas las administraciones públicas para que sea posible. Porque lo es; y no apostar por ello, abandonando a su suerte...