Zanjando lo de Espada
Reproduzco aquí lo que ya comenté en Facebook:
Leo en mi timeline de Facebook que un alto cargo del gobierno regional murciano hace un encendido elogio de Arcadi Espada, al que declara su amistad personal y admiración intelectual, al tiempo que denuncia la emboscada perpetrada en el programa de Risto Mejide emitido el domingo 17 de febrero. Nada que objetar, estamos en un país libre. Entiendo que alguien sienta aprecio por los postulados defendidos por Espada en determinados temas. Pero no la defensa incondicional, acrítica y sin fisuras de un sujeto que, al menos en el tema de la discapacidad intelectual (del que puedo decir que entiendo un poco) tiene un argumentario aberrante en términos morales, y en abierta contradicción con principios indiscutibles y consagrados en la constitución española y en la Convención Internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad. Y me atrevería a decir que también en contradicción con la Iglesia Católica, por lo que me sorprende esa defensa vehemente (o esa resta de importancia) de ese liberalismo eugenésico que propone Espada.
Es cierto que la entrevista de Risto Mejide era tramposa. Mejide no es periodista y se nota. Es lo que tiene ceder espacios periodísticos al espectáculo, conducidos por un 'entertainer'. Por otra parte tampoco Arcadi Espada es Caperucita Roja, sabía muy bien que no le esperaba la abuelita en el claro del bosque.
Sin embargo, la postura del sr. Espada en temas como la discapacidad intelectual no fueron inventados, ni tergiversados. Es más, tuvo oportunidad de reiterarlos explícitamente antes de la discusión final. Básicamente: "si alguien recibe un diagnóstico prenatal de discapacidad y no aborta, luego debería asumir él el coste de los tratamientos de su hijo 'enfermo' (término éste, el de enfermedad, repetido varias veces)". En el artículo original habla incluso de "crimen contra la humanidad" perpetrado por quien, a sabiendas, trae al mundo a un hijo con discapacidad.
Por tanto la cuestión no es la anécdota procedimental del domingo, sino el sustrato de estas ideas repetidas, no en uno, sino en varios artículos, "sostenidas y no enmendadas", lo que para mí convierten en tóxico el ideario de este individuo; son ideas que, transmitidas con desvergüenza en todo tipo de medios, atacan a la línea de flotación de la lucha más básica que libramos día a día los padres y madres y hermanos de las personas con discapacidad. Y que deben ser convenientemente rebatidas y expuestas como la falacia dañina que son.
Comprendo que Espada tal vez sea en otros espacios del pensamiento el Fénix de los ingenios, pero en estos ámbitos se muestra siempre que puede como "enfant terrible", soltando opiniones cuanto más abstrusas e hiperbólicas mejor.
Por ello te pido que, si te parece que no tiene crítica alguna y que su opinión sobre la gestión de los servicios públicos y la discapacidad es acertadísima, procedas a bloquearme y me ahorres el trabajo.

Comentarios
Publicar un comentario